Todo tiene una primera vez...
- Swingershy
- 14 mar 2018
- 5 Min. de lectura
¡Hola diablillos!
Cuando mi pareja me propuso por primera vez ir a un club de intercambio.
¡Wow!, yo me quedé horrorizada, no quería y no iba a ir a un “sitio así”, no concebía esa idea en mi mente, pero poco a poco y sin darme cuenta fuí cambiando esa forma de pensar tan tajante inundando mi cuerpo de curiosidad.
Me lo proponía de vez en cuando, y esa curiosidad ya la tenía por dentro, pero había algo más -MI INSEGURIDAD-, soy una chica súper tímida, estas cosas me cuestan un mundo, y me costó horrores decidirme, pero inexplicablemente un día dije -SÍ-.
Llegó el día, el día que iba a ir un club swinger “sitio así” por primera vez, como toda chica presumida, comencé a arreglarme con “calma”, duchita, lencería, ropa (la justa jaja), maquillaje. Estaba ultra nerviosa, pero intentaba mostrar lo contrario, cenamos en casa, nos tomamos un par de copitas, habíamos acordado ir a tomar una copita a TP (uno de los clubs más conocidos de Barcelona. Recuerdo y siento aquel día perfectamente, salimos de casa, subimos al taxi. Yo sin decir ni una palabra, mi mirada perdida en el horizonte a través de la ventanilla del taxi, llegando a TP Hugo me dijo algo así como “No me aprietes tanto la mano”, ¡Me di cuenta de que mis nervios ya no estaban tan escondidos como yo quería!
Llegamos, vimos la puerta ahí, iluminada en medio de la nada, nos miramos con cara de…”¿Seguro que es aquí?” Tocamos al timbre, entramos, cruzamos el pasillo que te lleva hasta la puerta, admirando todo milimétricamente. Justo al entrar, ¡ya nos vieron con cara de novatos!, así que nos explicaron el funcionamiento del club, distribución, normas.
Después de dar una vuelta por todo el club fuimos a tomarnos una copa para que el efecto del alcohol me relajara un poquito (estaba taaaan taaan nerviosa), poco a poco lo conseguí. Estábamos en la parte de arriba de TP, en el bar, estuvimos ahí sentados unos minutos hablando, comentando el lugar, la parejas que estaban por ahí… al menos a mi se me hacía un poco extraño el lugar, la situación, todo, pero aún así me pareció muy curioso, quería saber más.
Para acabar de calmarme (y para calentarnos un poquito) Hugo decidió darme un masaje, después de cambiarnos cogimos un poco de aceite y fuimos a una pequeña sala que se encontraba justo al lado del bar, dentro de aquella había una pareja de nuestra edad jugando entre ellos, nosotros no hicimos caso y seguimos a lo nuestro. Delicadamente (y un poco temblorosa) me tumbé en la camilla que se encontraba junto a la venta, respire profundo y deje mi mente en blanco mientras Hugo esparcía el aceite por todo mi cuerpo, masajeo toda mi espalda y poco a poco fue entrando a terreno más intimo. Me fui excitando cada vez más, cuando me giré y vi que aquella pareja nos estabas mirando (cosa que me incomodó un poco, aún no le había pillado el truquillo a que me miraran) pero seguimos a lo nuestro y ellos también por su lado.
Pasado un rato decidimos ir a dar un vuelta y a ver algo más sobre el ambiente, << Al salir de aquella habitación la pareja nos dijeron “podéis quedaros si queréis eh” >>, Yo roja como un tomate cogí y salí de ahí (mi cabeza en ese momento no daba para analizar lo que estaba pasando jajaja).
Fuimos a la sala de sado a jugar un poquito (Tengo que confesar que es una de las cosas que más me pone), lo primero que hizo Hugo fue ponerme en el potro atada de manos y cuello, sin poder moverme, follandome muy duro, de ahí pasamos a la mesa y me ató en la de pies y manos, así que más de lo mismo.
Quisimos ponernos más cómodos, nos tumbamos en la cama redonda que hay en esa misma sala, Hugo me tumbo poniéndose arriba de mi, comenzó a besar cada parte de mi cuerpo, yo estaba mas comoda, mas relajada, ya no me importaba donde estaba, en ese momento mi excitación era muy grande, comenzaba a estar en otro mundo.
Llego la pareja que habíamos visto en la sala de masajes, se pusieron al lado nuestro a follar, (Hugo que me estaba follando tan fuerte que ni me di cuenta), de pronto sentí como como alguien me acariciaba suavemente el brazo, los miré, miré a Hugo con cara de “¡madre mía! ¿que hago??”, se acercó a mi y me susurró al oído un “si quieres dejate llevar”, entonces suspiré, cerré los ojos, y me note aún más excitada.
La chica se acercaba cada vez más, sentía su respiración en mi oído, me giré y sin pensar comencé a besarla, acariciarla, dejándome llevar. (Era la primera vez que experimentaba con una chica y tengo que decir que aluciné). Mientras nosotras nos estábamos “enrollando” los chicos nos seguían follando, el otro chico comenzó a jugar conmigo, comenzó a acariciarme el cuerpo, tocarme los pechos, morderme los pezones, entró en terreno íntimo, y note que eso me excitó mucho más, sentir que otra persona que no sea tu pareja te excita de manera distinta, una situación nueva en mi vida, Hugo también tocaba a la otra chica y en un abrir y cerrar de ojos estábamos jugando todos juntos. La gente iba pasando, se quedaban a observar la escena que estábamos montando digna de “película porno”.
Después de ese momento fuimos a tomar una segunda copa, charlamos un ratito, reímos, nos dijeron de ir a la zona de la piscina y meternos en el jacuzzi y eso hicimos. (Nota: de buenas a primeras piensas que da un poco de asco ese jacuzzi pero luego se te olvida y creedme que no es para tanto ya que hay duchas por todas partes jajajaja)
Ahí escuchamos atentamente sus experiencias y consejos sobre este mundo, estábamos tan agusto y tranquilos que de repente eran las 6 am, hora de cerrar, pero ahí no acabó la historia, nos fuimos todos para casa a tomar la última copa.
Al llegar nos servimos algo para beber, sentados en el sofá hablando un poquito más, volvía a estar algo nerviosa, primera experiencia y acabamos en casa… por un momento le dije a Hugo “diles que se vayan” pero duró poco ese pensamiento ya que siempre tienes que pensar que no harás nada que no quieras, sin obligaciones.
La pareja desconocida comenzó a enrollarse en el sofá, Hugo y yo comenzamos a ponernos a tono también, Las prendas fueron cayendo al suelo, nuestra imaginación comenzó a volar y el ambiente a encenderse, nos vimos sumergidos en el ambiente caldeado, esa noche no hubo un intercambio completo, quiero decir que solo hubo penetración de hugo hacía mi, justo el momento que el otro chico iba a hacerlo, su miembro dejo de funcionar...
Chicos, hasta aquí nuestra primera experiencia, he de admitir que fue una experiencia muy emocionante, curiosa, excitante, nueva, maravillosa...
Ni mucho menos fuí aquella primera vez con el “objetivo” de hacer un intercambio, al contrario, me negaba rotundamente y únicamente me apetecía ir a ver el local, el ambiente y hacer una primera toma de contacto. Nunca tienes que hacer nada que no quieras ni mucho menos por compromiso, tienes que querer, dejarte llevar y DISFRUTAR con tu pareja!
Nos hemos guardado algunos detallitos para vuestras preguntas, así que si tenéis alguna pregunta sobre esta noche podéis dejar mensajes en el posto escribidnos en instagram
@swinger_shy

Comentarios